El déficit que arrastran las universidades públicas colombianas tiene su origen en dos artículos de la Ley 30 de 1992. Esa norma es la responsable de que cada año aumente la brecha entre los ingresos y los gastos, y de que las universidades se vean forzadas a generar sus propios recursos. Por estos días una propuesta de reforma parcial a la Ley 30 pasó a segundo debate en la Cámara de Representantes. ¿Qué implicaciones tiene para la UdeA?
Entre el primero de enero y el 20 de junio de 2023 el presidente Gustavo Petro escribió 139 veces la palabra prensa en sus publicaciones de Twitter. En ellas se refirió retomó sus trinos o mencionó de manera directa a por lo menos nueve medios de comunicación colombianos. Hizo críticas sobre el tratamiento informativo de temas relacionados con su gobierno, exaltó el cubrimiento de grandes medios internacionales y cuestionó el de varios medios nacionales.
Finalizó el viernes 9 de junio de 2023 el tercer ciclo de negociaciones de paz entre el Gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN). En su ceremonia de cierre, se firmó entre las partes un cese al fuego bilateral, nacional y temporal. Como se sabe, anunciar un cese al fuego es una tarea relativamente fácil: basta con la disposición de las partes; lo difícil es implementar las medidas y mantener silenciados los fusiles. En este texto se identifican al menos cuatro factores que hacen que el “Acuerdo n.º 11” o “Acuerdo de Cuba” tenga probabilidad alta de tener éxito.
A mediados de los años 60 del siglo pasado, después de recibir la recomendación de una comisión de expertos norteamericanos, la Universidad de Antioquia emprendió la construcción de una gran sede con facultades, laboratorios y edificios administrativos. Como escribió alguna vez la profesora María Teresa Uribe, “[Era] el ánimo de dejar atrás el peso de la historia para emprender nuevos caminos en un espacio urbano abierto, plural, diverso, donde [sería] posible el anonimato pero también el encuentro con desconocidos”.
En junio el Gobierno de Gustavo Petro y el ELN acordaron un cese al fuego que permitirá, de mantenerse el compromiso, avanzar en las conversaciones de paz sin la confrontación bélica que las rodeó hasta este momento. Los antecedentes, sin embargo, muestran la fragilidad de un proceso que tiene muchos elementos en contra.