En 2023 se ha vuelto común escuchar y leer términos como gentrificación o turistificación en algunos medios de comunicación colombianos para referirse al fenómeno turístico que se está viviendo en Medellín. ¿Realmente podemos hablar de turistificación o gentrificación turística en toda la ciudad? ¿Ha sido el turismo tan perjudicial como algunos de estos medios lo han pintado? ¿Qué tanto dependemos económicamente del turismo en la ciudad?
La gentrificación es un proceso de transformación social que comenzó hace más de cincuenta años en ciudades industriales como Londres (Inglaterra), donde grupos de clase media se mudaron a barrios obreros, lo que valorizó el espacio urbano y provocó el desplazamiento de los residentes originales. En Medellín, este fenómeno ha ocurrido desde hace décadas y no está exclusivamente relacionado con el turismo o extranjeros.
Por otra parte, la turistificación, término acuñado en los años 90 del siglo pasado, se refiere a los lugares que se convierten en enclaves turísticos, con cambios físicos en la infraestructura y en la percepción del espacio. Los geógrafos Rémy Knafou y Manuel De la Calle Vaquero, que han estudiado este fenómeno, señalan que implica un aumento de turistas y el surgimiento de plataformas de alojamiento, lo que conduce al desplazamiento de población local y vaciamiento de barrios debido a lo altamente rentable que les resulta a los propietarios.
Para el caso de Medellín, según Nataly Montoya, coordinadora de la especialización en derecho urbano de la Escuela de Derecho de la universidad EAFIT, no toda la ciudad sufre del fenómeno de la turistificación. Para ella se trata de un proceso que se ha llevado a cabo solamente en algunos sectores muy específicos. Aunque existe una definición para estos términos, estos fenómenos están adaptados a la localidad en donde se desarrollen. Es decir, no se dan igual en México o en Barcelona a como se dan en Medellín. Se construyen a partir de las particularidades propias del territorio.
Para comprender cómo el turismo masivo, con elementos de la turistificación o la gentrificación, ha afectado las dinámicas de la ciudad, hay que comprender cómo llegó el turismo como se conoce en la actualidad, y entender la forma en la que ha incidido en diversas dinámicas socioeconómicas.
Desde el 2000, cuando la Alcaldía de Medellín presentó el primer Plan de Desarrollo Turístico en el cual se planteó “las potencialidades de Medellín como destino turístico (...), las bases para la estructuración del Clúster de Turismo de Negocios y la creación del Medellín Convention & Visitors Bureau y Plaza Mayor (...)”, la ciudad se convirtió en uno de los destinos más apetecidos por viajeros de todo el mundo. Esto llevó a que en 2021 la ciudad se convirtiera en el segundo destino más visitado por turistas extranjeros, después de Bogotá y Cartagena, según datos de Migración Colombia.
En el 2013 se aprobó la Política de turismo de grandes eventos en Medellín y, en septiembre del 2015, nació la Política Pública de Turismo de la ciudad. Esta se propone en su primer artículo potencializar la ciudad “como destino turístico, generando desarrollo económico y contribuyendo al bienestar y la sostenibilidad social, ambiental, territorial y cultural a través de la dinamización del sector”. Además, recoge todos los decretos relacionados con el turismo hasta ese momento.
En el 2017 se crean, discuten y actualizan los principales lineamientos del sector turístico de la ciudad de Medellín: Política Pública de Desarrollo Económico, Política Pública de Turismo y Plan Estratégico de Turismo de Medellín 2018-2024.
Por otra parte, la pandemia propició una serie de situaciones que han influido en el auge exponencial del sector en los últimos años. Por ejemplo, el apogeo de nómadas digitales debido al auge del teletrabajo, y también los esfuerzos del gobierno por reactivar la economía posterior al Covid-19.
En 2019, un buen año para el turismo, el promedio de ocupación hotelera fue del 65% en Medellín, según Sandra Restrepo, directora ejecutiva de Cotelco, gremio que representa el sector hotelero y turístico de Colombia. Sin embargo, en el 2022 el turismo alcanzó cifras sin precedentes: 77% de ocupación hotelera, de la cual el 65% fue aporte de extranjeros.
Para entender a grandes rasgos las dinámicas de ingreso de extranjeros a la ciudad, entre 2018 y 2022 ingresaron a Medellín más de un millón 600 mil extranjeros. La mayoría, cerca de 700 mil, fueron residentes estadounidenses, según la Secretaría de Desarrollo Económico de Medellín. El aumento de turistas en ese periodo fue de 68.4%.
Desde el año 2000 la apuesta por el turismo en Medellín estuvo enfocada en el turismo de negocios. Sin embargo, con la creación de lugares como el Parque Arví (2010) y la construcción de las escaleras eléctricas de la Comuna 13 (2011), se dio un cambio en el rumbo del turismo en la ciudad para mutar en uno de tipo vacacional o de ocio. En la actualidad, los negocios, con un 6%, son la tercera razón de visitas del extranjero.
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En su mayoría, los extranjeros están conformados por un rango de edad entre 30 a 39 años. Un 62% corresponde a hombres y un 38% a mujeres. Esto podría tener relación con el tipo de lugares registrados que suelen visitar los turistas en la ciudad, entre los que destacan aquellos que tienen cierta historicidad, como la Comuna 13. Sin embargo, no se puede dejar de lado el resto de las motivaciones de los turistas que no quedan registradas en ninguna base de datos. Sandra Restrepo asegura que aunque hay un grupo que viene con la intención de esparcimiento también están aquellos que vienen “en busca de mujeres lindas y con la intención de conseguir estupefacientes y drogarse”. Esto propicia una de las problemáticas principales del turismo: la explotación sexual.
Restrepo afirma que si bien algunas viviendas turísticas que se ofrecen por plataforma digitales se encuentran dentro del Registro Nacional del Turismo (como está establecido dentro de la Ley 2068 del 2020), estas siguen sin la debida vigilancia con la que cuenta, por ejemplo, un hotel. Es precisamente esta falta lo que podría facilitar que una persona, foránea o nacional, ingrese menores de edad a estos inmuebles. Esto sin contar la cantidad de viviendas que se dedican a esta actividad económica y que no se encuentran registradas y evaden ciertas responsabilidades económicas como los impuestos.
Un turista gasta un promedio mensual de 1.500 dólares, según Nomad List. El Salario Mínimo Legal Mensual Vigente (SMLMV) de un colombiano es de 244 dólares mensuales ($1.300.606). Según el Sistema de Inteligencia Turística, en el primer trimestre de 2023, el gasto diario promedio del turista extranjero fue de 268.606 pesos (67 USD apróximadamente). Un gasto que representa, además, ingresos para un comerciante de la ciudad.
De hecho, el sector del comercio representó en 2022 el 18% del PIB de Antioquia, una cifra que está por encima del resto de las actividades económicas, y que además presentó un aumento del 58% con respecto al 2018.
Todo esto tiene relación directa con el empleo en la ciudad. En Antioquia, de acuerdo con cifras del Dane, el 15% de los ocupados se encuentran en el sector relacionado con los servicios (actividades artísticas, entretenimiento, recreación y otras actividades de servicios incluyendo los alojamientos y los servicios de comida). Este porcentaje representa a más de 450 mil de los ocupados totales de Antioquia y solo es superado en un 3% por el sector de reparación de vehículos.
En 2022, Antioquia fue el quinto departamento con la tasa de desempleo más baja del país con una cifra de 10,1%, un porcentaje que no se veía tan bajo desde 2015. Estos indicadores son el resultado, en parte, del sector turístico. Por ejemplo, la cantidad de eventos que se llevan a cabo en Medellín han impulsado la economía. Durante 2022 se realizaron en la ciudad alrededor de 38 conciertos, entre los cuales se destacaron artistas como Bad Bunny, Maluma, Morat, entre otros. El concierto de Bad Bunny le dejó a la ciudad, según las cifras brindadas por la Alcaldía de Medellín, aproximadamente 12 millones de dólares, la ocupación hotelera estuvo en un 90%. Además, la Alcaldía aseguró que en ese año se generaron alrededor de 2000 empleos.
Sin embargo, no se pueden desconocer las consecuencias negativas que este fenómeno ha traído a la ciudad y también hay que comprender que los conceptos de gentrificación y turistificación no son mitos. Existen y se están dando en algunas zonas de la ciudad, por ejemplo, en Provenza o en el Parque Lleras (El Poblado), como también se podría estar dando en algunas partes de Santa Elena, Belén, Laureles, etc. No obstante, se trata de espacios dentro de la ciudad cuyas dinámicas se han modificado para la prestación de servicios turísticos y suele ser muy complejo analizar esto debido a los diversos factores que alteran las dinámicas de un espacio, como pudo haber sido en su momento la construcción del Metro de Medellín. Pero no se puede responsabilizar únicamente a un sector por las consecuencias de un fenómeno cuando hay tantos factores involucrados, ni mucho menos generalizar la afirmación de que todos los turistas vienen a hacer lo mismo.
Por otro lado, no existen verdaderos consensos que ayuden a mitigar los efectos del fenómeno del turismo. El proceso para la creación de este atractivo turístico llamado Medellín se demoró años, pero Nataly Montoya asegura que nadie podía predecir esto. Asimismo, tanto Montoya como Restrepo coinciden en que debe existir un mayor control y/o regulación de las viviendas turísticas y agregan que es necesario una modificación del Plan de Ordenamiento Territorial para la ciudad, no solo en lo que respecta al turismo, sino también en lo relacionado con otros ámbitos. Además, Nataly Montoya es reiterativa en la necesidad de contar con un observatorio que reúna a los diversos actores que están presentes o interesados en el fenómeno, desde la academia, el sector turismo, actores comunitarios, hasta el sector inmobiliario quienes mayormente se han visto beneficiados, pero hace la aclaración de que es difícil de lograr y mucho más durante un año electoral.
En este podcast puedes escuchar las voces que hacen parte de esta investigación.
