CANALES

Versión impresa de De La Urbe

La violencia se ha disparado en la capital de Norte de Santander, una ciudad que además se volvió el lugar más peligroso para ejercer el periodismo en Colombia. Las amenazas son constantes y el ambiente no solo para la prensa, sino para toda la población es de miedo, zozobra y autocensura. Ahí operan unos 20 grupos de distinto tamaño y poder.

Publicado en DLU Lab